martes, 2 de agosto de 2016

La escultura de Bruno Walpoth

Bruno Walpoth es un escultor nacido en Bressanone, Italia, en 1959. Entre 1973 y 1978 fue aprendiz de escultor con Vincezo Mussner, y hasta 1984 estudió en la academia "Der Bildende Künste" en Múnich con el profesor Hans Ladner.
Entre 1985 y 2008 fue profesor en la escuela vocacional para escultores en Selva Val Gardena. En 1996 fundó, junto con Willy Verginer y Walter Moroder el grupo "Trisma". Desde 2000 es miembro del "Südtiroler Künstlerbund".


La serena belleza de las obras de Bruno Walpoth casi hace que no sean percibidas como esculturas hasta que uno las mira con cierta atención.

Las poses, los músculos, la expresión introspectiva en la mayoría de los personajes, denotan una profunda observación del ser. En la obra de Walpoth, la madera cobra una segunda vida, esta vez encarnada en la más pura humanidad. (Fuente)




Rabbi Akiva says: “Silence is a fence to wisdom”. What more astonishing definition is able to grasp the meaning of Bruno Walpoth’s sculptures, if not this very one? There’s peace in his silence; it’s precisely this rarefied and surreal dimension that is inhabited by the creatures to whom he gives shape, and whom he models peremptorily and with perfection, after having carefully observed and studied reality.
He uses candid and resistant lime wood or lead leaf foils which he lays out on the wood and hammers as in an embossed work, like in “Walking alone”. Here it’s as if for a very brief moment flesh has turned into metal, a deaf and bleak metal that devours all thoughts and releases the weight of solitude and introspection; the skinny and bony face is moulded on the hollow spaces where the sculptor reveals himself. And when the eyes send deep desolate gleams or when they express astonishment and amazement, or, furthermore, when they are closed, it’s always the silent torment of doubt that we grasp from the artist’s soul. (Fuente)














El artista y su obra.

La madera



"La madera es un material natural. Se siente bien. Huele bien. Puede ser diseñada de muchas maneras, especialmente en lo que respecta al procesamiento y acabado de sus superficies. Requiere un conocimiento de la veta que sólo puede adquirirse a través de años de experiencia directa. Sobre la influencia que la madera ha tenido en mi pensamiento o cualquier mensaje que transmitan las esculturas, no puedo emitir un juicio al respecto. La madera es algo natural en mi obra, como el aire que respiramos. No pienso en ello. La vitalidad de la madera como material orgánico está allí. El encanto y el reto está en mantenerla viva a través de un hábil manejo de la superficie."





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Redes